Hoy he salido con mi vieja bici. La nueva está en el taller del fabricante por tiempo indefinido —espero que no más de 15 días— por la rotura de un tornillo interno del cuadro.
Así que hoy, después de un merecido descanso después del duro Soplao, he salido a dar una vuelta con la bici con la que me inicié en esto del mountain bike hace ya 8 años. Bici que he ido mejorando a lo largo de los años, componente a componente, hasta prácticamente quedar el cuadro como único elemento original. Bici con la que he hecho miles y miles de kilómetros, que me ha acompañado en dos Caminos de Santiago y en multitud de rutas y viajes. Por todas esas cosas, la tengo un cariño especial.
Menos mal que no te vendí ni me deshice de ti, vieja amiga.
Así que hoy, después de un merecido descanso después del duro Soplao, he salido a dar una vuelta con la bici con la que me inicié en esto del mountain bike hace ya 8 años. Bici que he ido mejorando a lo largo de los años, componente a componente, hasta prácticamente quedar el cuadro como único elemento original. Bici con la que he hecho miles y miles de kilómetros, que me ha acompañado en dos Caminos de Santiago y en multitud de rutas y viajes. Por todas esas cosas, la tengo un cariño especial.
Menos mal que no te vendí ni me deshice de ti, vieja amiga.